Un líquido para sublimar es tu aliado ideal para preparar superficies difíciles como ciertos poliésteres o mezclas textiles antes del proceso de sublimación. Este tratamiento optimiza la adhesión de tintas y potencia el brillo y la durabilidad de los estampados, transformando prendas de calidad estándar en piezas con acabados profesionales.
Mejora tus resultados con líquido para sublimar
Descubre nuestra selección de productos especializados: líquidos pretratantes y sprays adhesivos listos para aplicar antes de sublimar. Diseñados para facilitar la fijación de color en superficies complejas y garantizar un resultado uniforme.
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¿Cuándo usar líquido para sublimar?
- Cuando trabajas con poliéster líquido para sublimar o mezclas con baja absorción, este pretratado mejora la adherencia de la tinta.
- Sirve para superficies difíciles o previamente estampadas, asegurando una mejor absorción del color.
- Recomendado en procesos de resellado tras la sublimación, para reforzar el acabado y la durabilidad.
- Compatible con diferentes configuraciones de plancha o prensa térmica ajustando humedad, presión y temperatura.
Beneficios del líquido para sublimación
- Aumenta la viveza, brillo y resistencia del diseño sin necesidad de cambiar tu equipo.
- Reduce manchas, corrimientos o áreas descoloridas en la prenda.
- Impulsa un acabado más profesional, ideal para tirajes limitados o personalizados.
- Aporta acabado uniforme sin incrementar el grosor o rigidez de la tela.
Ventajas sobresalientes frente a técnicas tradicionales
- Se aplica rápida y fácilmente en spray o por inmersión sin interrumpir tu flujo de trabajo.
- Compatible con prendas de poliéster, nylon u otras mezclas comunes en sublimación textil.
- Resultados más brillantes y consistentes que sin tratamiento, manteniendo la flexibilidad del tejido.
- Se seca en segundos, lista para sublimar sin tiempos de espera prolongados.
Cómo integrar el líquido en tu proceso
Humedece ligeramente la superficie con el spray o líquido pretratante, distribuyéndolo de manera uniforme. Deja actuar brevemente (5–10 segundos) y aplica tu transfer en la prensa térmica según temperatura y tiempo habituales. Verifica siempre en muestras previas que la absorción del color sea óptima.
El uso de líquido para sublimar es un paso inteligente para elevar la calidad de tus productos sublimados, especialmente cuando trabajas con textiles desafiantes o buscas un acabado más durable y definido. Implementarlo en tu flujo de trabajo te permitirá destacar con resultados más vibrantes, profesionales y resistentes al desgaste.